Conocí a Julio por sus artículos en Applesfera y a partir de ahí empecé a ver todos los sábados los directos en Twitch, donde me quedaba boquiabierto con todo lo que aprendía de él.
Su visión diferente a la que había conocido siempre sobre la forma de entender la programación y su manera de enseñarla fue lo que más me llamó la atención: Insistiendo en no utilizar librerías de terceros (o reducirlas al mínimo) para que el desarrollador sea el que lleve los mandos de su propia aplicación; o instando a no ser simplemente “programadores”, sino desarrolladores de software, entendiendo cómo funciona cada elemento y por qué se utiliza, y no copiando y pegando soluciones sacadas de Internet.
Julio transmite su pasión por el desarrollo nativo de una forma contagiosa, y gracias a él he decidido reorientar mi perfil profesional de desarrollo web a desarrollo nativo en Apple.
Este año he dado el paso y he comenzado una de las formaciones dirigidas por Julio en Apple Coding Academy.
Algo que me ha llamado la atención también, es que además de ser “una enciclopedia” como profesor, su perfil profesional como comunicador también marca una gran diferencia a la hora de asisitir a sus clases. Es algo que he sufrido en otras formaciones, en las que además de tener que asimilar conocimientos tenía que hacer un segundo esfuerzo por comprender al profesor; y Julio hace mucho más fácil centrarse en el contenido, siendo clases mucho más intensas, largas y de mayor profundidad técnica.
Otra cosa que quiero destacar (aunque tal vez parezca menos importante) es que su forma de ser, cercana y natural, ameniza mucho el contenido de lo que cuenta, ya sea en clase o en los directos de Apple Coding, aplicando el humor de una forma inteligente.
Por todo esto, mi más absoluta e indudable recomendación a Julio César Fernández Muñoz.